Buenos estudiantes. ¿Alguna vez has oído hablar del fenómeno “techo de cristal”? Se refiere a barreras invisibles que le impiden perseguir sus objetivos. Este concepto se suele utilizar en los lugares de trabajo, donde dices que hay un techo de cristal para los logros que puedes realizar y que el cielo no es el límite.
A menudo, estos techos de vidrio se presentan en forma de discriminaciones que enfrenta debido a su género, raza, estado, etc. El techo de vidrio es un concepto psicológico que puede traer estrés, trastornos del estado de ánimo, baja autoestima y puede afectar la salud mental. bienestar de la persona.
Las mujeres son las más afectadas por este concepto. Como siempre, existe un límite al que una mujer puede crecer en su carrera. En muy raras ocasiones, las mujeres llegan a puestos más altos en empresas y organizaciones. Esto fue más evidente hace unos años, especialmente a mediados de la década de 1980, pero ahora los tiempos están cambiando y las mujeres están más empoderadas que antes. Incluso después de todo esto, todavía hay algunas empresas que siguen esta tradición, a sabiendas o sin saberlo.
Lamentablemente, las mujeres tienen que demostrar su valía para alcanzar puestos que los hombres ocupan fácilmente. Es una decepción que incluso después de que las mujeres hayan demostrado sus habilidades en tareas de gestión, sigan siendo discriminadas en algunos lugares. Algunas empresas todavía ofrecen a las mujeres salarios inferiores a los de los hombres a pesar de que comparten el mismo rango, puesto y responsabilidades. Todo esto ha sido probado tras investigaciones y encuestas realizadas en diversas empresas e instituciones. El efecto del techo de cristal afecta a las personas mental y físicamente. Empiezan a dudar de sus habilidades y potencialidades y concluyen que solo merecen lo que obtienen.
Estoy aquí para decirte que no debes detenerte cuando veas un techo de cristal encima de ti. Deberías romperlo y seguir adelante creyendo que el cielo es el límite. Nunca dude de sus capacidades y potencialidades. Nunca es culpa tuya si tus superiores no creen en ti. Si encuentra un techo de cristal en su lugar de trabajo, no dude en informarlo a las autoridades superiores. Si todavía tratan de menospreciarte, retírate con orgullo. El lugar no te merece. Si son gerentes corporativos o cualquier persona de la autoridad de gestión, reconozcan el valor de la autoridad.
Nunca discrimine por motivos de género o por cualquier otro motivo. Considere a todas las personas por igual y sepa que todos merecen la oportunidad de crecer. Fomentar y asegurar la participación y representación activa de las mujeres en todas las reuniones, decisiones y cargos importantes.
La gente necesita reconocimiento por sus esfuerzos. Es una necesidad humana básica. Si permanecen estancados en su puesto incluso después de trabajar duro día y noche, les provocará frustración y estrés, lo que provocará una disminución en la satisfacción laboral y, finalmente, perderán el interés en su trabajo. El mundo esta cambiando. Los cambios deben llegar a todos los ámbitos de la sociedad. Ya es hora de que las personas se despidan de estos estereotipos y les den el reconocimiento que merecen en función de sus habilidades.